..:::..Bienvenido al portal del Estudio Jurídico..:::..

martes, 31 de agosto de 2010

La joven sin nombre era "Luci" Gómez

IDENTIFICARON A MILITANTE DE LA JP SEPULTADA COMO NN EN CORONDA
Cuatro jóvenes fueron ejecutadas en febrero de 1976 a mil metros de la autopista. Tres de ellas ya habían sido identificadas. Ahora el Equipo Argentino de Antropología Forense entregó al juez Rodríguez las pruebas genéticas de la cuarta víctima.

 Por Juan Carlos Tizziani







La llaman la masacre del camino de Las Moras por el lugar en cercanías de Coronda donde cuatro mujeres jóvenes fueron ejecutadas y sepultadas en una fosa común, en febrero de 1976. Una investigación del juez federal Reinaldo Rodríguez, ya le había devuelto el nombre a tres de ellas en una causa que se inició hace once años. Esta semana, el Equipo Argentino de Antropología Forense logró identificar a la cuarta víctima: Gladys Lucía Gómez ("Luci"), una militante de la Juventud Peronista de 24 años, oriunda de Formosa, que estudiaba Ciencias Exactas en Resistencia y se había refugiado en Santa Fe, a fines de 1975, perseguida por el terrorismo de estado. No pudo escapar. Ella y otras tres compañeras de militancia en la JP: Olga Teresita Sánchez, María Cristina Mattioli y Graciela Cristina Siryi, fueron secuestradas entre el 27 y 28 de febrero de 1976, asesinadas con disparos en la cabeza y las manos atadas a la espalda y enterradas en una fosa común, a mil metros de la autopista a Rosario. Estuvieron como NN más de 30 años, hasta que la justicia comenzó a devolverles la identidad, recuperó las pruebas del crimen y ahora avanza en el juzgamiento de los ejecutores. En diciembre de 2009, el juez Rodríguez procesó al ex jefe del Area 212, coronel José María González, y al ex subjefe del Destacamento de Inteligencia Militar 122, teniente coronel Roberto José Diab, a quienes imputó 22 y 46 homicidios, respectivamente, entre ellos los de Sánchez, Siryi y Mattioli, a los que deberá agregar el de "Luci" Gómez.

Hasta el hallazgo del enterramiento clandestino en el campo militar San Pedro -en junio último , la masacre del camino de Las Moras era la única fosa común que había sido hallada en la provincia. La descubrió un arriero el 20 de marzo de 1976, en la ruta 64, a mil metros de la autopista, con los cuerpos de cuatro mujeres jóvenes. La dictadura dejó trascender que habían sido "estranguladas" y asoció el caso a una supuesta "trata de blancas", según las crónicas de la época. Falso. Luego los restos fueron inhumados en el cementerio de Coronda como NN, hasta que la justicia comenzó a develar la verdad: eran militantes de la JP ejecutadas con el tiro del final. La primera que se identificó fue Sánchez, el 15 de setiembre de 2004; la segunda, Mattioli, el 6 de setiembre de 2007, y la tercera, Siryi, en abril de 2008.

Faltaba saber quién era la cuarta víctima. Una investigación de la abogada Lucila Puyol y sus compañeros Víctor Salami, Beatriz Pffeifer y Valeria Silva trabajó sobre la hipótesis de que se trataba de otra militante de la JP que se había refugiado en Santa Fe. Lo que en los últimos meses era una reconstrucción histórica en la que colaboraron también otros militantes políticos de Resistencia y de Formosa, se convirtió esta semana en una certeza: los pruebas genéticas revelaron que la joven sin nombre era Gladys Lucía Gómez, de 24 años, según el informe que el Equipo Argentino de Antropología Forense entregó al juez Rodríguez. El análisis se realizó en Córdoba, en el Laboratorio de Inmunogenética y Diagnóstico Molecular (Lidmo EEAF) a cargo del genetista Carlos Bullo, con un resultado del 99,99 por ciento al comparar los perfiles genéticos de los restos de Lucía y con la muestra sanguínea de su madre biológica.

"Esto demuestra la importancia de la memoria", se emocionó Puyol en diálogo con Rosario/12. "Más allá de que se necesita la prueba genética para confirmar la identidad de un desaparecido, es fundamental la reconstrucción histórica con datos y testimonios de los sobrevivientes de la dictadura. Fueron los compañeros de Lucía los que mantuvieron la búsqueda todos estos años y permitieron llegar a este resultado", agregó.
Ayer, Puyol presentó una denuncia para que la fiscal federal Nº 2 Cintia Gómez "inste la acción penal contra quien y/o quienes resulten responsables de la persecución política, secuestro, torturas, desaparición de cadáver y homicidio de Gladys Lucía Gómez"

lunes, 30 de agosto de 2010

Papel Prensa, la historia

El lunes 30 de agosto a las 21 hs, la TV Pública presenta un informe especial acerca de la historia de Papel prensa, el rol del Estado en esa historia, el miedo de las víctimas, el testimonio de Lidia Papaleo de Graiver, el protagonismo de Héctor Magnetto, la situación actual.

Mira en vivo acá



Presentación del Informe sobre Papel Prensa por parte de la Dra. Cristina Fernández de Kirchner, Presidenta de la Nación, en Casa de Gobierno el martes 23 de Agosto de 2010.

Mira acá 

30 de agosto: Día Internacional del Detenido Desaparecido


Por iniciativa de FEDEFAM (Federación Latinoamericana de Asociaciones de Familiares de Detenidos-Desaparecidos) el 30 de agosto se conmemora el Día Internacional del Detenido Desaparecido.

Esta fecha constituye un aporte al fortalecimiento de la conciencia mundial sobre la persistencia de la práctica de la desaparición forzada de personas -catalogado como crimen de lesa humanidad por la OEA y la ONU. Se inscribe, asimismo, en el trabajo que los organismos de derechos humanos realizan para influir en las políticas publicas nacionales e internacionales con el objetivo de prevenir toda forma de autoritarismo y consolidar la vigencia de los derechos y libertades.

En la última sesión del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas (Ginebra, 29 de junio de 2006) se aprobó el proyecto de Convención internacional para la protección de todas las personas contra las desapariciones forzadas.

Marta Ocampo de Vázquez, Presidenta de Madres de Plaza de Mayo - Línea Fundadora y miembro de FEDEFAM y Horacio Ravenna, co-Vicepresidente de la APDH (Asamblea Permanente por los Derechos Humanos), participaron en representación de todos aquellos que promueven esta iniciativa desde hace 25 años.

47 países aprobaron
el proyecto que deberá ser ratificado en la sesión ordinaria que el Consejo tendrá en el mes de septiembre.

Clarín, entre la caída y la decadencia





Entre mayo de 2009 y julio de 2010, la venta de 
Clarín bajó exactamente en 60.000 ejemplares diarios, tomando el promedio de lunes a domingo. Son cifras brindadas por el Instituto Verificador de Circulaciones (IVC). Esto representa una caída acumulada del 20 por ciento. Mucho más preocupante para los directivos del Grupo Clarín es que, un 12,75% de esa caída se registró en los últimos seis meses. En efecto, en enero de este año Clarín vendió 344.945 ejemplares, mientras que en junio fueron 300.837. Es decir, en los últimos seis meses Clarín vendió 44.000 diarios menos. Cabe consignar que este pronunciado retroceso va en sentido contrario de la venta general de diarios en la Argentina durante este período.
Así como 
Clarín sufrió un retroceso en las ventas de diarios de papel, la tendencia en soporte virtual es aún peor. Respecto de las visitas al sitio www.clarín.com, se registró una caída del 43,2% en los últimos tres meses. Esto va en sentido contrario de la visita de internautas a las páginas de noticias e información que crece de modo incesante. Por caso, el sitio www.taringa.com ya supera en visitas al de Clarín. Esta información es totalmente confiable y proviene del sitiowww.alexa.com/topsite/countries/ar que pertenece a la empresa Amazon.
Alexa tiene un software que le permite hacer diversas mediciones entre los internautas. Entre junio, julio y lo que va de agosto, la cantidad de visitas a sus páginas (ver cuadro 2, 
pageviews –“páginas vistas”, en inglés–) disminuyó un 43,2%. Esto no mide la cantidad de personas que ingresan al sitio sino el total de las páginas visitadas. Es decir, es una combinación de disminución de visitantes más lo poco que “navegan” quienes ingresan al sitio. Otro indicador importante en este sentido es el de “la tasa de rebotes”, que mide la cantidad de visitantes que al ingresar a la página web de un sitio desisten de ingresar a alguna de sus ventanas. El indicador es importante porque alerta a quienes hacen la página de la cantidad de lectores desencantados. Cabe consignar que hace pocos meses la página de Claríncambió de diseño y trató de poner énfasis en deportes, inseguridad y entretenimiento. Sin embargo, en los últimos tres meses, la tasa de rebotes de Clarín creció un 24%. Esto es, aumentó la cantidad de personas que abren la página y al cabo de unos segundos salen de ella sin ingresar a ningún artículo o blog (ver cuadro 3, bounce rate –“tasa de rebote”, en inglés–).
Estos datos deben ser interpretados y cotejados con las ediciones de
Clarín de esta última semana. La primera evidencia es que la caída de las ventas se debe a la tergiversación de la información por parte de sus editores. Así, muchos lectores cambiaron de diario. Cabe preguntarse cómo se comportarán aquellos que, en los últimos días, se encontraron con que las primeras páginas no son firmadas por las principales plumas del diario sino por los empresarios o sus abogados.
Papel Prensa - La Verdad. El martes 24, a las siete de la tarde, las mediciones de audiencia de la cadena nacional pedida por la Presidencia registraron –según la medidora Ibope– 28,45 puntos de rating en Capital y Gran Buenos Aires. Esto es, sin sumar los canales de noticias, que suman centenares de miles de televidentes, la audiencia fue de tres millones de personas, en promedio, durante los 70 minutos de la alocución presidencial. Se puede inferir que no menos de seis millones de argentinos escucharon que Clarín y La Nación están fuertemente sospechados de estar involucrados en un despojo empresarial en el cual hubo torturas y asesinatos. Es decir, el mito de que la agenda informativa la ponen Clarín y La Nación se topó, al menos ese día, con una pared muy fuerte. El gran negocio de Héctor Magnetto y Bartolomé Mitre –o los actuales directivos de La Nación – era mantener el tema Papel Prensa en el silencio. Sin embargo, ellos supieron con varios meses de anticipación que el 24 de agosto el Gobierno haría público el resultado de esta investigación. Lejos de prepararse y elegir un camino potente de comunicación, actuaron de un modo temperamental e improvisado.
Lo que pasó esta semana revela que el miedo se adueñó de los ejecutivos. En primer lugar, porque el lunes por la noche, las principales espadas periodísticas del grupo esperaban una andanada de autoritarismo por parte de la Presidenta. Una prueba de ello es que el programa 
Palabras más, palabras menos, que conducen Ernesto Tenembaun y Marcelo Zlotogwiazda, había grabado los testimonios de Jorge Fontevecchia y Jorge Lanata un par de horas antes del discurso presidencial. Lanata, anticipándose a los hechos, algo muy inconveniente para el ejercicio del periodismo, dio por sentado que los anuncios iban en la catastrófica dirección de la intervención estatal en Papel Prensa que pregonaba Magnetto desde hacía unos días a sus periodistas. El papel de Tenembaum como conductor quedó marcado en un momento en que salió en auxilio de Lanata. Fue cuando éste dijo que “en estos casos yo me pongo del lado del más débil, que en este caso es...”. Tenembaum, que es psicólogo, se apresuró a decir: “... Clarín”. Desde ya, Lanata iba a decirlo, pero por si acaso, el entrevistador disparó primero.
Esto, que resulta anecdótico, fue visto por muchos televidentes ese martes a las 23, un par de horas después de que la Presidenta anunciara que el Ejecutivo giraría a la Justicia el informe y que, además, aun estando en minoría legislativa, enviaría el proyecto de ley que el viernes ingresó a la Cámara de Diputados y que está destinado a transparentar el mercado del papel de diarios y a crear una comisión bicameral que controle el sector. La pregunta elemental es: ¿por qué estos dos periodistas, experimentados, emitieron unas entrevistas que quedaban a contramano y hacían quedar –al menos a Lanata– más que desubicado? La respuesta parece evidente: es más importante que Lanata y Fontevecchia se muestren como aliados incondicionales. Son los “periodistas independientes” que necesita Magnetto. Muy a tono con el pensamiento del CEO de 
Clarín, ese día, Lanata hizo sus reflexiones sobre el pasado reciente. Casi como un filósofo, dijo: “A mí me parece que a nosotros nos vendieron un montón de carne podrida con lo que fue el ’70 y la visión que nosotros tuvimos fue a lo mejor excesivamente romántica. Yo no estoy de acuerdo con la violencia política. Matar a alguien en un sótano con la cabeza tapada. Así mataron a Aramburu”, dijo el periodista, y continuó: “Yo no me siento lo mismo que eso, y no me parece que esté mal decirlo. Yo no creo que sea un héroe un tipo que hizo eso”.
Eso sí, a costa de que sus presentadores y conductores queden como gerentes ante la luz pública. Eso sí, a costa de que los periodistas de la sección Política de 
Clarín dejen de firmar sus artículos o que, directamente, los dejen sin escribir porque no saben hacerlo como abogados que sepan argumentar en el sentido de que Magnetto eluda la prisión y no como comunicadores que pretenden informar a los lectores.
Un caso singular es Eduardo Van Der Kooy, el editorialista del terror, que esta semana tuvo la osadía de comparar a la Presidenta con el genocida Emilio Massera. Fue el miércoles y, al principio de su artículo, afirma que “escuchar a Cristina hacer hincapié sobre la importancia de diferenciar al Gobierno del Estado encerraría casi la misma necedad que demostró el almirante Massera cuando reclamó a sus pares de la Junta Militar la publicación de alguna lista de desaparecidos.
Los trabajadores de Canal 13 o de TN, Mitre o 
Clarín atraviesan un momento de mucha tensión. Un solo ejemplo de los tantos que viven a diario, se dio el miércoles, al día siguiente del discurso presidencial. El locutor y conductor Luis Otero, minutos antes de comenzar el noticiero del mediodía, entró al estudio e interpeló a los gritos al equipo técnico. En tono amenazante preguntó cuál iba a ser, de ahí en más, la actitud frente a “la dictadura”, como calificó al Gobierno. Luego de eso, fue a la oficina de una productora del canal y, en presencia de otros productores periodísticos, dijo que “en la empresa había gente que votaría por los Kircher” en 2011.

“A mi marido lo mataron por Papel Prensa”, asegura Lidia Papaleo

DESPUÉS DE 34 AÑOS, ACEPTÓ DAR UNA ENTREVISTA POR PRIMERA VEZ

“A mi marido lo mataron por Papel Prensa”, asegura Lidia Papaleo

Publicado el 29 de Agosto de 2010

La viuda de David Graiver responsabiliza a Héctor Magnetto: “Tenía la mirada de un tipo poseído, violento.” “Jamás fui libre. Vivía con pánico y creo que todavía me pueden matar”,asegura. Cómo es el vínculo con su hija y su cuñado. 
 
Tiene las manos delicadas. Cuidadas. Con intensidad, casi las entrelaza alrededor de la taza de té. Toma un sorbo. Otro. Y otros tantos a lo largo de las más de dos horas de entrevista. Lo hace de a poco. Sin apuro. Con una serenidad meditada, que no tuvo el 16 de septiembre de 1976, cuando bajó del avión abrazando, con esas mismas manos, no una taza, sino una urna. Llevaba las cenizas de David Graiver. El gran amor de su vida había quedado reducido a cenizas cuando el avión en que viajaba se había estrellado en México, el 7 de agosto de ese año. “Fue un atentado. Estos tipos le han pedido a la CIA que lo limpien”, dispara, segura.
“Mi mamá, que conocía muy bien nuestro amor, pensó que yo me iba a querer matar. Entonces, me trajo a la gente de la Cruz Roja, que me enchufa medicación. En el velatorio me tiré dormida abajo el cajón, estaba totalmente descolocada. No podía entender, no había explicación. Los dos teníamos una absoluta idolatría por nuestra hija, y sin duda esa fue la bandera de la que me agarré para vivir. Y para que mi hija tuviera, me lo prometí, la verdad acerca de su padre yo iba a seguir”.

-Su hija María Sol es la misma que hoy pide que no la involucren con Papel Prensa y que desmiente sus dichos.
-En el Consejo de Guerra, cuando terminé y me permitieron hablar sola, dije que estaba orgullosa de mi marido y “por el fruto se conocerá al árbol”. Y que el fruto de nuestro amor, nuestra hija, iba a ser como nosotros, pero me equivoqué.

Está sentada a la cabecera de una mesa de oficina para ocho personas. Maneja los tiempos. Sus tiempos. Ya no siente ese miedo que se mimetiza en la piel. Siente fuerza. Arrojo para llegar a la verdad. Su verdad. “Esta es una historia de amor. Cuando yo presiento la ternura en el hombre, a mí me conmueve. Es como tocarle el corazón. David era un hombre tremendamente tierno. Dormíamos de la mano, y el gordo, que era enorme y se me venía encima…Él me había prometido que se dedicaba cinco años más a ser empresario y, después de eso, iba a ser historiador económico de la Argentina. Pero quería hacerlo con libertad y para eso no iba a vivir en la Argentina. No sé si lo hubiera hecho... Éramos cómplices”, asegura.
“Es una historia de amor”, insiste. Atravesada por una intriga familiar, dinero, poder, crímenes de lesa humanidad, despojos económicos, torturas, desaparición y asesinatos. Una historia de amor como, tal vez, no haya otra. Signada por un crimen casi 16 años después de nacer: Lidia tenía 14 años cuando lo conoció y 30 cuando murió. “Su muerte fue como quedarme sin piel”.

–¿Por qué cree que lo asesinaron?
–Porque murió de la forma más estúpida, contra un cerro, con un avión al que no le andaba el altímetro. Además, días antes, un hombre mexicano Gabriel Alarcón muy poderoso que tenía un diario (El Heraldo), le dice a David: “Tu debes vender Papel Prensa, porque te va a costar la vida.” Y yo, que lo único que sabía era que un mes antes había visto sobre un escritorio un logo precioso de papel y preguntado qué era. Me dijo: “es una fábrica de papel”.  Salimos del almuerzo y le pregunté a David: “¿qué es esto que te dijo Alarcón?” Y David lo menospreció. Dijo que Alarcón estaba preocupado por algo sin sentido: “viste cómo son los mexicanos”, me dijo. Y yo, cuando desaparece el avión, estando en pista, lo primero que hago es llamarlo a Alarcón. Le digo llorando que el avión había perdido contacto y él me dijo: “Lidia, con el primer rayo de sol yo salgo a buscarlo.”
–¿Alguna vez entendió por qué lo mataron por Papel Prensa?
–No, nunca entendí. Yo supe. Yo no tuve dudas. Nunca. Papel Prensa significaba tener el monopolio del papel en el país, si no era manejado correctamente. La intención de David no era la de un monopolio, y por eso la forma en que él distribuye las acciones. Era muy fuerte que tuviera  un canal, que tuviera un diario, una productora de cine y otras cosas. Él apostaba a los medios de comunicación en una forma absoluta.
–Cuando llegó a la Argentina desde México, ¿qué situación vivió?
–La peor etapa. Yo empecé por recibir amenazas inmediatamente después de morir David en agosto de 1976. Y tuve que esperar tres días. Primero tuve que esperar tres días para que el Ejército encontrara el cuerpo. Empezó a haber llamados en México tres o cuatro días después de la muerte de David. Primero, molestando. Después, para decir que teníamos que desaparecer, desprendernos de todo y desaparecer, que íbamos a morir todos. Nadie decía quién era. Después, alguien se presentó como representante sindicalista: “ustedes tienen una deuda, paguen ya”, decía. También hubo una llamada de Montoneros, o eso dijeron. Y me volví a la Argentina. En los Estados Unidos, adonde tuve que ir, me decían que no me volviera, que la situación no estaba dada, pero yo tenía a mi hermano Osvaldo preso, a mi padre imputado y quería estar con mi familia. “Además, ¿por qué razón?”, me preguntaba. “Yo no hice nada malo.” Y volví.
–¿Qué pasó cuando volvió?
–Empecé a ir a la oficina. La segunda persona de David, hacía mucho tiempo, era Jorge Rubinstein. Uno de los primeros días de noviembre, estábamos en la oficina, era tarde. Le pregunto cómo se iba a ir tan tarde. “Porque no voy a manejar más, me tomo un remís.” Nunca llegó a la casa. Lo agarró un vehículo grande allá por la mitad del trayecto, por City Bell, Villa Elisa, al medio. Milagrosamente vivió. No sé qué pasó con el chofer. Pedimos explicaciones en la policía. Nadie dijo nada. Fue internado en un sanatorio, completamente enyesado, y  poco después lo operaron del corazón.
–¿Cree que fue un atentado?
–No creo. Estoy segura. Para mí, en ese momento en que me estaban amenazando y le pasa esto a Rubinstein, cualquiera hubiera pensado así. ¿Qué hicieron al sacar a Rubinstein del medio? Sacar a la única persona que podía dirigir las empresas. El único que estaba al tanto. Con el hermano de David, Isidoro, no tenía vínculo comercial hacía dos años, que había pasado sin manejar nada de acá. A Rubinstein lo matan para que no hable.
–Cuando Rubinstein sufre ese atentado, ¿ya existían los llamados para que vender Papel Prensa?
–A mí me cita Martínez Segovia (yo ya lo conocía de otras reuniones) al Hotel Plaza y me dice: “Mirá Lidia, en entrevistas con el gobierno, ellos quieren que Papel Prensa se venda únicamente a argentinos y que no pertenezcan a la comunidad judía.” Apenas llegué a la Argentina, por septiembre, y después fue el accidente de Rubinstein, y eso me lo confirma.
–¿Usted no formaba parte de ninguna estructura de negocios?
–Nunca cerré ni abrí ningún negocio. Eso lo hacían él e Isidoro, antes de alejarse. Pero desaparecido Rubinstein, queda Isidoro.
–¿Por qué, si estaba alejado?
–Porque el papá de David, heredero junto con mi hija, tomó actitudes tales como que cuando aparece esta presión de Montoneros para que vayamos a una reunión, yo decido que vaya él, no yo, con una hija de 2 años. No había respiro en la presión. Lo voy a ver a Lanusse. Yo quería que le de la carta mía a Jorge Rafael Videla, como presidente del país. Me dicen: “¿por qué la carta a Videla?” Y yo digo que le tengo que explicar que a mí me dicen que le tengo que vender Papel Prensa a los diarios, que me están amenazando, que “me dicen que usted dice que le tengo que vender todo a los diarios, hacer desaparecer todo”. ¿Cómo les iba a creer a los que venían, si Isidoro había tenido una reunión con un coronel –que terminó preso porque era todo falso–, uno disfrazado de coronel? Un amigo, una persona muy importante, le dice: “Yo te consigo una entrevista con ese ‘coronel.’” Y era un payaso disfrazado.
–¿Realmente pensó que Videla podía ayudarla?
–No ayudarme. Yo creía que Videla me iba a escuchar: yo estaba convencida de que Papel Prensa era un bien tan importante para el país, estaba tan orgullosa de eso, que nunca creía que el gobierno iba a permitir un robo de semejante cosa.
-¿Cómo fueron las horas previas al 2 de noviembre de 1976, cuando firman el traspaso?
–Primero, mi suegra, por el amor de su vida, que era su hijo, estaba medicada, muy mal. Estábamos mi cuñado, en defensa de sus papás, yo ni sabía que Isidoro había ido a Clarín a discutir precio. Era un loquero. Voy a esa reunión, ya entregada al pánico totalmente. El 16 de septiembre bajé del avión con las cenizas de mi marido de un lado, mi hija del otro, no dándome cuenta. Cuando voy, muy atemorizada, no por temor a de-saparecer, pero sí con la sensación plena de que nosotros estábamos siendo amenazados de muerte. Ellos eran gente muy poderosa, con todo el poder de los militares, y nosotros no éramos nada. Ni abogado teníamos. La misma gente que trabajaba con nosotros nos decía que no teníamos otra posibilidad que vender al grupo este. Ese día lo único que dice es que no judíos ni extranjeros. Después, viene otra persona, Guillermo Gainza Paz, que nos ofrece lo de los diarios, como representante de los diarios. No habla conmigo, habla con Isidoro. Era permanente la presión.
–¿Cómo cree que se gestó todo?
–Todo esto estaba preparado desde mucho antes: David había estado con Videla en 1975, en una conversación donde David le regala un Rolex, según me dijeron, y lo que yo sentí desde que pisé Buenos Aires era que todo me sonaba a peligro, cada día estaba más inmersa en la muerte.
–¿Cree que le robaron Papel Prensa? ¿Quiénes?
–El señor Magnetto, la gente de La Nación. Los hechos lo demuestran. Asociados con la dictadura. Hay un tipo del grupo de Camps que torturaba, que aun sin verlos a ellos, era tan intenso el dolor que muchas veces se te movía el vendaje, y lo reconocía por el pies. Cuanto más sangraba yo, él me eyaculaba encima. De tanto picanearme, me dislocaron los hombros. Me ponían sobre un elástico, atada, y para escapar de la picana, me movía hacia un costado y el otro. Después ellos me tiraban en un calabozo, muy chiquito, muy frío. Y yo, que soy muy creyente, sentí que Dios me iba a salvar. Desnuda, quemada, era yo la que protegía a las otras dos mujeres. Nos abrazábamos para darnos calor.
–Héctor Magnetto, ¿cuándo aparece en su vida?
–Lo vi una sola vez en mi vida. Nos avisa mi cuñado que tenemos que ir a firmar. Voy a esa reunión, insisto en que era de noche. Mis suegros quedan lejos, no escuchaba lo que hablaban. Quedo sentada en otra mesa, y Magnetto nunca se sentó, siempre estuvo parado. Se presenta, me dice quién es y me pone papeles que nunca leí, me da la lapicera, y me dice: “firme porque en esto va la vida de su hija y la suya”. Nos miramos. Cuando me da la lapicera, sosteniéndola para que yo lo mire, no tuve dudas. Era un hombre con mucho poder y mucha locura. La mirada de un tipo poseído, violento. Me agaché, firmé, él me pasaba las hojas. Después nunca más lo vi en mi vida.
–¿Era libre en ese momento?
–Desde la muerte de David jamás fui libre. La muerte de David significó quedarme sin piel, desprotegida. Era una persona sola en el mundo. Después de eso, rehacerme, fue un largo proceso que no pude construir llegando a la Argentina. Creí que al volver a la Argentina iba a poder lograrlo. Perder a un ser amado, tu compañero de 16 años juntos… Yo sentía que mi pecho realmente iba a estallar de dolor. Estaba en México, salía a la calle, caminaba con mi hija, me metía en templos…Recuerdo que cuando me llaman y me dicen: “ya encontramos el cuerpo que estaba desaparecido”, agarro su cepillo de dientes para tener algo de él. No tener piel es la mejor explicación. Yo no estaba capacitada para hacer un negocio. Estaba, porque era su viuda. Tenía que estar presente. A tal punto que cuando voy a la reunión por la venta del Banco Comercial de la Plata, el señor Martinelli, con petróleo, barcos, caballos de carrera, me dice: “perdone, señora, pero con usted no hablo, no hago negocios”, y me tuve que ir. Nadie hizo negocios conmigo.
–¿Por qué se presentó en el juzgado de la sucesión para pedir que el juez aceptara la venta?
–Firmé para que el juez aceptara la venta de Papel Prensa, el 9, porque las órdenes seguían llegando. El 14 desaparecí.
–De manera que la operación no duró sólo un día.
–Darle la autorización al juez no fue en la misma fecha. Mi firma es auténtica. Hubo otra asamblea, y la gente cree que fui, pero yo no fui, y aparece mi firma que sí es auténtica. Como yo no tengo experiencia con los medios ni con todo esto, cuando yo fui a la Asamblea de Papel Prensa, lo que yo dije salió todo interpretado de cualquier manera. Salió que fui torturada, pero nunca dije que fue antes de la firma. Dije que fuimos obligados a vender. Dije que esperaba que la empresa se convirtiera en lo que habíamos soñado. Una empresa enorme. Hay una permanente intención de confundir.
–¿Por qué acepta dar un reportaje ahora?
–Porque ahora siento que hay garantías. No la garantía de que no me maten, pero yo tengo 65 años. Mi vida hasta acá fue un homenaje a mi marido. Lo que soporté en la tortura fue para que mi hija, si yo me moría ahí, leyera la verdad de su padre, por lo menos mi verdad. Y traté siempre de sea donde fuera, mantener una actitud. De cuando me hacían preguntas pensar en el porqué de esas preguntas. No enroscarme en la cosa enferma de lo que me preguntaba, sino en el por qué.
–¿Qué problemas le trajo no estar casada con David en la Argentina?
–Yo estaba casada en los Estados Unidos, entonces la familia dice que empecemos la sucesión en Argentina, cosa que no debía haber hecho porque  seguramente en los Estados Unidos nada de esto me hubiera pasado. Además, al haber estado casada con él, como su mujer, la heredera en los Estados Unidos, tenía el 75% y el 25% la hija o los hijos. Cuando llegué a Argentina me presentan al abogado que yo ya conocía que me iba a hacer la sucesión (Miguel de Anchorena), que me explica que en realidad no soy heredera. Que en la Argentina no hay divorcio, que David estaba casado y separado antes por el artículo 67 bis en firme, lo que fue una gran trampa. Se vuelve a hacer el divorcio de él, porque los americanos no aceptaban la separación de la Argentina, y nos casamos ante la Corte Suprema de Justicia porque para él era verdaderamente importante. Una ceremonia muy emotiva para él.

Gesticula. Por momentos, habla con el cuerpo. Pero su pelo casi no se mueve. Lo lleva tan lacio como el brushing recién hecho le permite. El flequillo le cubre toda la frente. Recto, firme. Como sus palabras. La única vez que el pelo se moverá, será cuando ella lo levante. Un movimiento rápido de la mano para dejar la nuca la desnudo, descubre una cicatriz que la parte al medio. “Es la que me quedó por la operación del tumor”, explica. No tiene pudor. Tiene memoria.

-¿Por qué cree que fue la más torturada de la familia?
-Porque no me pudieron quebrar, seguramente para ellos, algo insoportable. Y porque era muy fuerte. Yo siempre supe que debía ser un ejemplo. En la cárcel me decían “La Tercera Posición”: yo no era delincuente ni guerrillera. El preso político es un preso que jamás dejará de priorizar la solidaridad. Una prostituta carísima en el Departamento de Policía, me dijo que iba a terminar en Ezeiza yo, pero por seis años, nada más. Andaba con militares. Un día Blanco ahí me dice: “yo la voy a ayudar, porque su marido a mí me ayudó” y me pidió, un día antes de irse, el teléfono de mi mamá. Y al día siguiente, vino mi mamá. Me vio torturada, pero le dije: “quedate tranquila mamá, Osvaldo está bien”. Es que el buenito de Ramón Camps me permitió ir a ver a mi hermano que estaba preso. Me llevaban y me traían. Me preguntaban a mí dónde estaban las acciones de La Opinión. Camps, mediante tortura, me llevó a la casa de Julio a buscar las acciones, y me hizo un careo con Jacobo Timerman. Cuando lo vi, estaba destruido, lleno de agujeros de la tortura, y ahí traté de suavizar la cosa, que no fuera tan grave. Camps me hace llevar a la granja del Departamento de policía de La Plata, y de atrás de un gran escritorio me dice: “Señora, es usted una gran argentina, y puede pedirme lo que quiera: bañarse, ver a su familia, ir a comer afuera.” Y ahí veo mi cartera, que me la habían robado las minas que lo rodeaban y le digo: “necesito mi cartera, el documento de mi hija…” Y me dice: “usted me pide a mí el documento de su hija. Le estoy diciendo que me pida lo que quiera.” Y lo mira a su secuaz y le dice: “Llevala adonde ya sabés.” Pensé lo peor. Yo ya había estado en dos lugares. Me llevan, me bajan del Falcon, me ponen en el baúl, escucho al perro, me llevan a la sala de tortura, y estaba mi hermano.
–¿En qué condiciones estaba su hermano Osvaldo?
–Lo abrazo. El olor de un tipo torturado es imposible de olvidar. “Osvaldo, te torturaron”, le dije. “Sí, pero estoy bien.” Me llevaron de vuelta, por suerte lo legalizaron, lo tenían de che pibe, cocinar, limpiar. Ahí la vio a mi suegra.
–Usted declaró en la justicia haber sido torturada, quemada y operada por un tumor cerebral por los golpes que recibió.
-Fui la persona que más torturaron del grupo, tiene una razón: jamás dije que lo ellos me querían hacer decir.  Era un delirio tan grande lo que querían que yo dijera, sobre todo hablar mal de los judíos. Me decían “la impura” porque había estado con un judío. El tema básico era demostrar que los judíos tenían un trato, me decían los torturadores de Ramón Camps. Según ellos, tenía que declarar que: Juan Domingo Perón le había dado a José Bel Gelbard (ex ministrro de Economía en la última gestión justicialista antes del golpe, fue amigo y socio de de David Graiver) los lingotes de oro que habían llegado desde Alemania con los submarinos alemanes a Mar Del Plata. Gelbard los conserva y no sé qué hace, los habrá puesto en un Banco. Cuando Perón vuelve a la Argentina, le dice a Gelbard delante de mí porque sabía que yo lo sabía, que va a ser Ministro de Economía, que los tiene que devolver los lingotes, usarlos, que él le va a dar toda la economía. Y Gelbard le dice, sí, pero hay alguien que me va a ayudar: David Graiver,. Esto tenía que decir yo, lo que es una locura imposible de creer aún hoy. Me pusieron al lado gente increíble, para que los delatara, como el turco Paz que había trabajado con mi marido y era una excelente persona, gente que me ponían al lado y como yo no contestaba lo que querían, me pegaban cada piña en la espalda, en los riñones…. Cuando me operan, estando presa, me llevan al lado del CEMIC, y dicen los que me atienden: esta mujer tiene dislocado cada miembro de su cuerpo cuatro veces.
-¿Durante los interrogatorios, le preguntaron sobre Papel Prensa?
-¿Cómo me iban a preguntar sobre Papel Prensa si yo ya había vendido Papel Prensa? Tampoco me preguntaron por el Banco Hurlingham, ni del banco Comercial porque estaban vendidos. ¿Por qué me iban a preguntar por Papel Prensa? A mi no me llevaron para preguntarme por eso. Me llevaron para que firmara y afirmara lo que ellos querían que yo dijera. Quién podía decir cosas, que no sea el 2do. de David (Rubinstein)? , desde el punto de vista familiar, era yo. Era yo. La mujer tenía que decir que Perón delante mío había dicho todo eso. O sea que todo esto era una operación del movimiento sionista para tapar al país, para llegar al poder: Canal 2, La Opinión, Papel Prensa eran las personas que estaba preparando para ser presidente.
-También fue sometida a un Consejo de Guerra de la dictadura.
-Mi madre va al Consejo de Guerra, y mi hermano Osvaldo la prepara. Le dice: “mamá, estos son militares, no digas nada, escuchá, ojo”. Gallino (Oscar Bartolomé, general de la dictadura y oficial instructor del Consejo de Guerra) le preguntó: “Señora usted sabe donde está? ¿Sabe quiénes son estas personas?” “Sí, son todos los torturadores, asesinos que matan a la gente, a los jóvenes del país”, le dijo mi madre. Suspendió la entrevista, tiró la gorra. Se armó un lío espantoso. Por suerte no le hicieron nada. Estoy recobrando toda la educación que tuvimos con mis hermanos. Gracias a esta familia con estos principios tan solidarios, puedo ver estas todas estas cosas con cierta distancia.
 -Mucho dicen que usted recién ahora habla sobre lo que pasó en Papel Prensa.
-No es así. ¿Por qué aparece el tema Papel Prensa? Primero porque Osvaldo, mi hermano, viene batallando por esto desde siempre. En mi caso, cuando estaba presa, en dónde iba a explicar por qué mi marido no estaba para defenderse y defendernos de todo lo que nos estaba pasando. A mis compañeras de cautiverio, cuando me preguntaban, siempre les respondía que estaba ahí por Papel Prensa.
-Su cuñado, Isidoro, dice que no es cierto que usted se haya cruzado con Héctor Magnetto el 2 de noviembre, el día de la firma. ¿Estuvieron juntos todo el tiempo?
-Isidoro supo todo, y es más: yo le dije todo lo que me había dicho Magnetto. Miente. No sabía que lo había dicho. Sus neuronas…. Yo fui a verlo a Moreno, estaba su mujer, Marta, y me dice me parece que no tenés buena relación con tu cuñado, y le digo mi cuñado no tiene buena relación conmigo, y yo no tengo ninguna. Lo único que siempre hice fue querer ayudarlo. Mi hija en un momento dado me dijo que no quería tener ningún contacto con ellos. Lo llamo a Isidoro le cuento que María Sol no quiere volver a verlos, y si mi hija no quiere, yo tampoco los veré. Mi suegra, cuando salió de la cárcel, dijo que por primera vez en su vida había tenido una hija que la había cuidado, porque la otra por peleas absurdas jamás había estado. Cómo no iba a ser solidaria con esta mujer presa, aunque tenía el pecado de no ser judía, no podía dejar de ser solidaria con ella. Era una mujer de una humildad y un sufrimiento poco común.
-Pero, entonces, después las cosas cambiaron. ¿Cómo es ahora su relación con María Sol?
-Yo tuve siempre la mejor relación con mi hija. Cuando salí de estar presa puse todo lo necesario para recuperar el vínculo. Hace tres años que decidió que no tenía más nada que ver conmigo. Obviamente hay intereses atrás de los que no puedo hablar.
-¿Cómo vivió que hicieran juntos esa presentación ante escribano público?
-Fue algo terriblemente doloroso.
-¿Por qué cree que María Sol publicó la solicitada?
-Porque probablemente está manejada por sentimientos muy  controvertidos que hacen que sus comportamientos se conviertan en inexplicables.
-¿E Isidoro, por qué cree que cambió sus dichos?
-Por dinero.
-De acuerdo con lo publicado por el diario La Nación, son los compradores de Papel prensa los que requieren a María Sol, y a su vez, ella le pide explicaciones a Isidoro. ¿Cómo cree que pueden haber ocurrido los hechos?
-No entiendo que la gente aún se pregunte si esto es cierto. Lo que pasó, pasó con Papel Presa. Permanentemente, a través de todos estos años, Clarín y La Nación dieron muchas pruebas de lo que estaban haciendo por el país, de lo que son capaces de hacer: comprar gente, hacer que la gente se venda para llegar a su fin, que no agrega ni saca a lo de María Sol. Isidoro ya declaró, así que lo que diga ahora…vamos a ver si coincide y si no coincide será falso testimonio. Creo que Magnetto es Magnetto: uno más uno, es dos.
-En la edición de hoy (viernes) del diario Clarín, se publique que cuando declaró en La Plata no le imputó ningún delito a Héctor Magnetto. ¿Esto es cierto?
-No, no es cierto. Cómo va a ser verdad, si  yo conté de qué forma firmé los papeles que firmé y las palabras textuales de Magnetto. Dije claramente que yo fui a firmar pero firmé bajo la presión de Magnetto. Supe que no tenía otra posibilidad más que firmar.
-La presidenta Cristina Fernández calificó de “libertad ambulatoria” su situación, ¿le parece correcto?
 -Buena imagen. Totalmente. Una cosa extraña que me pasó fue que me sentí aliviada cuando estuve en la cárcel. Lanusse me dijo el grupo no es buen visto por la Junta, éramos un clan al que había que desplazar.
-¿Cómo calificaría la cobertura de Clarín y La Nación sobre este tema?
-Vergonzante.
-¿Qué relación tenías vos y el resto de los Graiver con la Organización Montoneros?
-Ninguna.
-¿Les consta que los que llamaban eran de esa organización?
-No, no nos consta. Pero tiempo después, en el año 1989, Juan Gasparini, Rodolfo Galimberti y otros dijeron que habían sido testigos de cuando David agarró la plata, entonces se le devolvieron  16 millones de dólares.
-¿Supo alguna vez si ese dinero estuvo en Papel Prensa?
-Jamás estuvo. Si es que ellos le dieron algún dinero a David, cosa que nunca me constó, las fechas por la compra no coinciden. Papel Prensa lo compró mucho, pero mucho tiempo antes.
-La diputada Elisa Carrió vinculó directamente Papel Prensa con Montoneros, ¿qué opina?
-El Estado se tomó el tiempo necesario para que apareciera todo el telón de Montoneros e ir a apoderarse de los bienes, poner la CONAREPA, por ejemplo, ¿qué sentido tenía que nosotros estuviéramos presos?

Hace una pausa. Vuelve a tomar un poco de té. Está frío. Pide que lo calienten. “En microondas está bien”, explica. Se acomoda la camisa, sonríe apacible. Se predispone a seguir con la entrevista.

-¿Cómo vivió el anuncio presidencial?
-Fue la mayor alegría. Un momento muy emocionante. Cuando estuve la segunda vez con Cristina me preguntaron y dije que sabía que cuando estaba con ella, cuando la miraba, que iba a hacer lo que me había dicho: ir a la Justicia y al Parlamento.
-¿Leyó los diarios al día siguiente?
-Sé que los poderes aún de ciertos grupos, son muy grandes. Le dije a mi hermano que cuando me metí en esto (y nadie quería que lo hiciera) sabía en qué me metía. Voy a pedir ser testigo protegido.
-¿Cree que la pueden matar?
-Sí. Creo que no tengo miedo a un secuestro, considero que la justicia y sus habeas corpus hoy serían recibidos. Esa seguridad jurídica la siento. No me van a desaparecer, pero sí creo que puedo tener un accidente. No salgo sola, miro por la calle.
-¿Quiénes creen que lo harían?
-Estoy cansada de soñar que se me para un hombre delante y me da un tiro. Hay gente con tanto odio en la oligarquía argentina. Esa gente, jamás se caracterizó por ser los ejecutores, pero sí buscar quién lo haga.
-¿Miguel ángel Strassera aseguró que cuando le tomó declaración, usted nunca habló de Papel Prensa? ¿Por qué?
-Nunca me preguntaron de Papel Prensa.
-¿Cómo cree que terminará esta historia?.
-Bien, con la verdad. Con la verdad acumulada durante 34 años. Los papeles están, las pruebas están. La palabra no sirve. La prueba es irrebatible. <

jueves, 26 de agosto de 2010

Hay más papeles secretos sobre Papel Prensa


Por Daniel Cecchini y Eduardo Anguita
politica@miradasalsur.com


Parece una paradoja, pero cuando el miércoles pasado el juez Federal Daniel Rafecas se declaró incompetente para investigar si hubo delito en la transferencia de las acciones de Papel Prensa durante la última dictadura, dio un paso que tendrá consecuencias decisivas para el progreso del caso.
Papel Prensa: un reclamo de Justicia

La detención de José Alfredo Martínez de Hoz por orden del juez federal Norberto Oyarbide, a principios del mes pasado, luego de decidir su procesamiento por secuestro extorsivo y un embargo sobre sus bienes por dos millones de pesos, no sólo tendrá consecuencias en esa causa sino que también abrirá las puertas para que otros delitos económicos cometidos durante la dictadura sean considerados crímenes de lesa humanidad. El despojo de Papel Prensa a la familia Graiver puede ser uno de ellos.
Bajo tortura

El relato de Lidia Papaleo de Graiver frente a la asamblea de accionistas de Papel Prensa no deja dudas sobre la complicidad de civiles y militares para apropiarse de la empresa.
Testimonio de Osvaldo Papaleo

“Los empresarios de Clarín, La Razón y La Nación hacen una primera reunión con Isidoro Graiver (hermano de David) en la que le hacen una propuesta ridícula y le dicen que era eso o nada. En ese clima se hace una segunda reunión donde se firma un preconvenio, en noviembre del ’76, en el despacho de Bartolomé Mitre en la calle San Martín. Allí los integrantes de la familia son separados para presionarlos individualmente.
Rafael Iannover aportó más datos

La Comisión Fiscalizadora de Papel Prensa escuchó el viernes el testimonio de Rafael Iannover, contador de David Graiver y ex director de la compañía,sobre uno de los ilícitos expuestos ante la última asamblea de accionistas de esa empresa. Ianover reveló que él no había vendido a Fapel - la sociedad creada entonces por los diarios Clarín, La Nación y La Razón - las acciones de la firma papelera que estaban a su nombre, sino que se las habían sacado bajo coacción.
Otro revés judicial para Clarín

La estrategia judicial de los directivos de Clarín y La Nación , Héctor Magnetto y Bartolomé Mitre respectivamente, sufrió un duro revés esta semana con la decisión de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Contencioso Administrativo Federal de desestimar la apelación presentada por el Directorio de la firma Papel Prensa contra la decisión del Gobierno Nacional de establecer un precio igualitario para los compradores de papel.
Con esta resolución, queda firme la decisión gubernamental de garantizar la provisión de papel para todos los periódicos del país, a un mismo precio.
En abril de 1977, el general Oscar Gallino se reunía con los dueños de Clarín, La Nación y La Razón antes de interrogar en el Pozo de Banfield a Lidia Papaleo de Graiver

En abril de 1977, el general Oscar Bartolomé Gallino fue el instructor de los consejos de Guerra a los que la dictadura cívico-militar sometió a los herederos, socios y empleados de David Graiver, titular de las acciones mayoritarias de Papel Prensa. A dos días de la presentación por parte de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner del informe Papel Prensa - La Verdad, Miradas al Sur está en condiciones de afirmar que Gallino, un hombre de extrema confianza del dictador Jorge Videla (quien brindó con champagne con Ernestina Herrera de Noble cuando se inauguró la planta de la empresa en San Pedro), se reunió en por lo menos tres ocasiones con los propietarios de Clarín, La Nación y La Razón pocas horas antes de someter a interrogatorio a Lidia Papaleo, viuda de Graiver, y otros integrantes del grupo Graiver en el centro clandestino de detención conocido como Pozo de Banfield. Todos estos detenidos llevaban semanas de ser sometidos a torturas en el escabroso Puesto Vasco, donde el jefe de los torturadores era nada menos que el temible jefe de la Policía Bonaerense, el entonces coronel Ramón Camps.
La primera de esas jornadas –que tenía la modalidad de primero hablar con quienes ya se habían apropiado de Papel Prensa y luego con los humillados y despojados verdaderos propietarios– contó con la participación de los dueños de Clarín, La Nación y La Razón. La segunda vez, Gallino se encontró con los representantes legales de los tres medios y el secretario de Industria de la dictadura, mientras que la tercera vez fue con propietarios y representantes legales juntos. Estos encuentros tuvieron lugar entre el 9 y el 15 de abril de 1977 y cabe consignar que Lidia Papaleo había sido sometida a brutales torturas y violaciones hasta ser sentada frente a Gallino. La hipocresía de que aquel régimen brutal era una dictadura exclusiva de uniformados queda desbaratada ante la complicidad abierta que revelan estas reuniones, donde la sangre y las acciones de la empresa eran parte de una misma coctelera. Basta mirar las ediciones de esos tres diarios por esos días para verificar el entusiasmo con que los artículos de La Nación, Clarín y La Razón apoyaban al Estado terrorista.

Al gallinero. Gallino era un oficial de Inteligencia y uno de sus antecedentes fue haber comandado la brutal represión al Batallón 601 Domingo Viejobueno, donde un centenar de militantes del ERP murieron tras haber sido entregados por un agente infiltrado. Para ver la importancia que tenía, basta mencionar que cuando el general Roberto Viola asumió la presidencia, Gallino fue gobernador bonaerense.
La actual situación legal de Gallino es, por estas horas, muy interesante. Hace un año y medio que la Fiscalía Federal de Delitos de Lesa Humanidad de La Plata pidió su captura por su participación en el centro clandestino Puesto Vasco. Hace un mes y medio, la misma fiscalía le agregó otro pedido de captura, esta vez por su accionar en el Pozo de Banfield. Hasta el momento, ningún juez federal dio curso a estos pedidos.
Cuando Gallino se siente en el banquillo de acusados, deberá hacerlo ante el titular del Juzgado en lo Criminal y Correccional número 3 de esa ciudad, Arnaldo Corazza.
La fiscalía podrá preguntarle entonces a Gallino sobre la existencia de memos secretos, rubricados con su firma, donde constarían esas reuniones, así como otras mantenidas, en esos mismos días y antes de interrogar a los detenidos, con el jefe de la Policía de la Provincia de Buenos Aires, Ramón Camps. “Se trataría de una suerte de agenda o partes diarios de carácter secreto, relacionados con la instrucción de los consejos de guerra a los que fueron sometidos los Graiver”, dijo a Miradas al Sur una fuente de la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación, querellante en la causa. Esos memos habrían permanecido durante años guardados en un viejo edificio perteneciente al Ejército, ubicado en Carlos Pellegrini y Juncal. Vueltas de la historia, ese palacio fue ahora restaurado para ser la sede de Unasur (Unión de Naciones Suramericanas), cuyo secretario general es Néstor Kirchner.

Testimonios de ayer y de hoy. Mientras tanto, la instrucción de la causa “Secretaría de DD.HH. de la Nación s/denuncia” –que investiga la utilización del terrorismo de Estado contra integrantes del Grupo Graiver– avanza en la Fiscalía Federal para delitos de lesa humanidad de La Plata, a cargo de Hernán Schapiro y Marcelo Molina. Además del pedido de detención de Gallino, los instructores ya tomaron declaración a Osvaldo Papaleo –hermano de Lidia, la viuda de David Graiver– y a Rafael Ianover, testaferro de Graiver y vicepresidente de Papel Prensa, ambos secuestrados en la Operación Amigo, conducida por Ramón Camps y Miguel Etchecolatz. Fuentes de la querella señalaron a Miradas al Sur que las declaraciones de Ianover y Papaleo coinciden casi punto por punto con los testimonios que ambos brindaron en 1986. En los próximos meses se espera tomar declaración al resto de los secuestrados del Grupo Graiver en Puesto Vasco y el Pozo de Banfield que aún están con vida.
Miradas al Sur tuvo acceso a las declaraciones judiciales realizadas en 1986 por Lidia papaleo de Graiver, Rafael Ianover, Osvaldo Papaleo, y las empleadas Silva Fanjul y Lidia Gesualdi, entre otros integrantes de Empresas Graiver S.A. (Egasa) que estuvieron detenidos-desaparecidos en Puesto Vasco y el Pozo de Banfield. En aquella oportunidad, la viuda de Graiver relató su secuestro, el 14 de marzo de 1977. El registro judicial señala, en fojas 246: “Aproximadamente a las 21 horas golpearon la puerta, invocando pertenecer al Ejército Argentino, lo que hizo que se franqueara la entrada, ingresando varias personas de civil y armadas. Tras ser identificados todos los ocupantes, la dicente es esposada, junto con Lidia Gesualdi, la que es golpeada en ese momento. Inmediatamente se las conduce fuera del edificio advirtiendo que en un automóvil estacionado en la puerta se encontraba Silvia Fanjul. También son privadas de su libertad las demás personas que se encontraban en el departamento, a excepción de Bogany”. También describe las sesiones de tortura a las que fue sometida en Puesto Vasco: “Inmediatamente se la condujo a una suerte de cocina, se la desnudó, fue atada a un elástico de cama comenzándose la primera sesión de tortura mediante picana eléctrica. Aclara que le fue quitada la venda de los ojos cuando fue desnudada, por orden de su torturador, al cual entonces ve. Posteriormente –días después– se entera que se trataba del comisario inspector Alberto Rousse”, señala el expediente.
En aquella declaración, Lidia Papaleo no deja de consignar el interés de sus secuestradores por Papel Prensa. En fojas 247 está escrito: “Que también desea aclarar que en Puesto Vasco en ocasión de ser torturada se hallaba presente el comisario Etchecolatz. Que tanto en el Pozo de Banfield como en la Comisaría de Banfield concurrían Beto Cozzani, la Tota y Darío Rojas, quienes le preguntaban por Papel Prensa, y que junto con (Alfredo) Abuin manejaban (cambio a foja 248) la vinculación entre Papel Prensa y Egasa”.
De este mismo interés da cuenta Rafael Ianover en su declaración de 1986. Relata que fue secuestrado el 12 de abril de 1977 y llevado a Banfield. “Que recuerda que ello no le llamó la atención pues ya se encontraban detenidos los miembros de la familia Graiver” (fojas 221). “Que si bien no puede ver por estar vendado, lo hacen sentar en una silla, haciéndole escuchar marchas peronistas. Luego de un rato le quitan la venda y lo llevan a una habitación en la cual lo espera un señor vestido de civil que lo interrogó sobre su accionar en Papel Prensa S.A., quién era el presidente, cómo habían sido nombrados, etc.” (fojas 222). “Que el día siguiente lo vuelven a vendar y a atar las manos, lo meten en un coche en el asiento trasero, conduciéndolo al lugar donde había estado el día anterior con la diferencia que lo hacen subir por una escalera de caracol a dos pisos y lo introducen en una celda en la cual se encuentra solo por espacio de cuatro días, llegando al quinto día el general Gallino, designado preventor, quien lo interroga nuevamente respecto de Papel Prensa” (fojas 223).
Las declaraciones que hace casi 25 años realizaron ante la Justicia Federal los integrantes del Grupo Graiver derriban los argumentos del Grupo Clarín cuando sostiene que las acusaciones de haberse apropiado de Papel Prensa en complicidad con la dictadura son un “invento” o una “causa armada” por el Gobierno .

La garantía no siempre es parte


Una vecina promovió una demanda de daños y perjuicios por una obra lindera a su vivienda: acusó a los dos constructores al ser "responsables del proyecto y dirección ejecutiva de la obra y también copropietarios de la obra en construcción y del inmueble". A su vez fueron citadas en garantía la "Compañía de Seguros La Mercantil Andina S.A." y la "Federación Patronal Seguros S.A.".

La Suprema Corte de Justicia de la Provincia de Buenos Aires desestimó la extensión de la condena a "la citada en garantía que no había asegurado las contingencias derivadas de la actuación profesional de los coaccionados", sino "la responsabilidad civil de los dueños como tales", condición en la que aquéllos no han sido enjuiciados, pues "los accionados asumieron en el negocio un doble rol y dicha duplicidad importó asimismo contraer dos riesgos diferenciados: uno como cotitulares de la cosa y otro como profesionales de la construcción".

Ambos riesgos fueron asegurados por distintas compañías y en el sub lite sólo se reclamó por los "daños acaecidos frente a la concreción de uno de ellos: la irregularidad en el ejercicio del arte de edificar", por lo que no se trata de colocar en estado de indefensión a los asegurados, ni de imposibilitarlos arbitrariamente de invocar una garantía preacordada, como lo apuntó el a quo", aseguran los ministros Hilda Kogan, Héctor Negri, Daniel Fernando Soria, Juan Carlos Hitters.

El desistimiento efectuado en relación a los copropietarios del inmueble construido importó una "transformación de la pretensión tanto en los sujetos -legitimados pasivos se redujeron a dos- como en la causa", ya que "sólo se reclama desde ese momento el resarcimiento con fuente en la calidad de dichos particulares como responsables del proyecto, dirección y construcción del edificio", de modo que a partir de allí "la discusión fondal se centró en la responsabilidad de los demandados como directores de la obra en cuestión", consigna la sentencia.

FUENTE: DiarioJudicial.com


----------------------------------------------------------------------------------------



Título: La garantía no siempre es parte

Fecha: 26-ago-2010

Cita: MJ-MJN-37246-AR





El muro de Facebook no es lo suficientemente amenazante


La IV de la Cámara del Crimen confirmó el sobreseimiento de un hombre cuestionado por una publicación que efectuó en la red social Facebook al considerar que la conducta atribuida al imputado no encuadraba en ninguna figura delictiva.

La causa llegó a la Cámara tras la apelación de la querella. En la sentencia, el tribunal sostuvo que la parte actora intentó "enlazar un primer mensaje publicado en el 'muro' de la red social 'Facebook' del imputado, -en el cual se haría referencia a la familia de la damnificada-, con otro de tintes amenazantes sin determinación de su destinatario".

"Tras el análisis objetivo de los elementos del sumario, consideramos que no es posible sostener que la conducta atribuida al imputado encuadre en alguna figura delictiva, máxime si se considera que las frases en cuestión habrían sido consignadas por el encausado en su portal personal y la querella no pudo explicar el modo en que tuvo acceso a éste", expresaron los camaristas Alberto Seijas y Carlos Alberto González.

"De tal modo -añadieron- se exhibe ausente la relación que debería vincular al emisor con el destinatario de la especie amenazante pues, en todo caso, la exteriorización de las expresiones aparecen concretadas a partir de la búsqueda de la víctima en un ámbito propio del imputado, quedando a exclusivo cargo de aquella la adjudicación del rol de destinataria del mensaje".

FUENTE: DiarioJudicial.com

lunes, 23 de agosto de 2010

Las FARC pidieron una reunión a Unasur por la "paz" colombiana

Las guerrilla colombiana pidió al organismo regional que convoque a una asamblea para exponer su visión sobre el conflicto armado en el país y reiteraron su voluntad de buscar una salida política

"Señores presidentes: cuando lo estimen oportuno estamos dispuestos a exponer en una asamblea de Unasur nuestra visión sobre el conflicto colombiano", dice una "carta abierta" del Secretariado del Estado Mayor Central de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia difundida por la Agencia de Noticias Nueva Colombia (Anncol).




El desempleo llegó al nivel más bajo de los últimos 20 años

El organismo confirmó que la tasa de desocupación llegó a 7,9% en el segundo trimestre del año, tal como había adelantado la presidente Cristina Kirchner. Un año antes fue 8,8%. La subocupación fue de 9,9 por ciento.-


La Encuesta Permanente de Hogares que hizo el organismo oficial de estadística en el segundo trimestre detectó que la oferta de trabajadores se elevó en los 31 aglomerados urbanos relevados a 11,44 millones, sobre una población total estimada en 24,84 millones de personas. Significó sendos aumentos de 39.000 y 170.400 personas, en el trimestre y últimos doce meses, respectivamente.

En esos períodos la creación neta de empleos fue de 83.000 y 265.500 personas , al ascender a 10,54 millones de personas, el nivel más alto de la serie histórica.

De ahí resultó que en ese universo de la población el desempleo se contrajo en 44.000 personas en el trimestre y em 95.100 en comparación con el segundo trimestre de 2009, totalizando ahora 898.000, a los que se suman 1,13 millones de personas que se ocupan parcialmente, pese a que se ofrecen a tiempo pleno.

De la mano de la notable reactivación de la economía, con amplia difusión entre los sectores de la producción de bienes y servicios, determinó a los ojos del organismo una notable recuperación del mercado de trabajo.

La información surge de los principales indicadores del mercado de trabajo se obtiene de los datos recolectados por la Encuesta Permanente de Hogares (EPH), programa nacional que lleva a cabo el Instituto Nacional de Estadística y Censos juntamente con las Direcciones Provinciales de Estadística.

Impacto nacional
La extrapolación de los datos del Indec correspondiente a 31 aglomerados, al total de la población, que por estas alturas se estima en algo más de 40 millones de personas, surge que la creación neta de empleos en los últimos doce meses fue 397.000 personas, mientras que la desocupación se redujo en 208.000 casos, a 1,4 millones trabajadores.

Según esas proyecciones, en la economía concurren 18,2 millones de personas al mercado de trabajo, de las cuales logran su objetivo 16,8 M, equiparando el nivel que se había alcanzado en el cuarto trimestre de 2009, y algo menos de 1,4 M se mantienen inactivos esperando una oportunidad laboral.

El relevamiento del Indec detectó que las regiones que más han logrado reducir el desempleo fueron la patagónica, con 2,3 puntos porcentuales a 5,8% de la población económicamente activa, seguida de la de Cuyo 1,7 pp a 5,4 y la del Noroeste 1,5 pp a 7%, en menor medida se ubicaron la Pampeana 1 pp y 0,8 el Gran Buenos Aires, que exhibieron tasas de 9,2 y 8,1%, respectivamente. Se estancó en el Noreste en el mínimo del conjunto, con apenas 3,7% de la PEA.





Cuestionan el inminente informe sobre Papel Prensa

22-8-2010


Diputados opositores hablan de intento de controlar a los medios y comparan al Gobierno con el chavismo. Fuerte crítica a Moreno.

En vísperas de la difusión por parte del Gobierno del informe sobre Papel Prensa, diversas voces de la oposición se adelantaron a repudiar la medida. Es el caso del diputado de la Coalición Cívica Adrián Pérez, quien alertó que "el Gobierno quiere afectar la libertad de prensa y controlar los medios".

Para el legislador nacional, "hay una decisión del gobierno de afectar la libertad de prensa. No hay un gobierno que intenta la pluralidad. Todo esto está atado a la construcción de medios amigos, de avanzar sobre Papel Prensa".

Perez sostuvo que "la actitud del Moreno sobre Papel Prensa es una actitud que no corresponde a ningún funcionario de la democracia".

Desde el PRO, Laura Alonso emitió un comunicado en el que sostuvo que "los Kirchner son peor que Chávez", y afirmó que tanto Néstor como Cristina Kirchner "están jugando con fuego y empiezan a mostrar su faceta más autoritaria, porque quieren controlar la opinión".

Afirmó Alonso que los Kirchner "dicen que defienden los derechos humanos, pero no investigan la desaparición de Jorge Julio López. Se embanderan en la defensa de la libertad de expresión, anuncian que no van a enjuiciar periodistas por sus opiniones, pero después aprietan a los medios con la pauta oficial".

"Acá se juega más que uno o dos negocios, se juega la libertad de expresión y la libertad de información", agregó y denunció que "quieren controlar la opinión de los ciudadanos. Ahora arman un informe que le encarga la Presidente a Moreno. ¿Alguien puede creer en la seriedad de ese informe? Seguramente la mayoría podrá acordar acerca de la intencionalidad que motivó el mismo".





sábado, 21 de agosto de 2010

LA TIGRESA GANO EN SU DESPEDIDA


s
La Tigresa se fue con toda la gloria. (Foto: Télam).
La Tigresa se fue con toda la gloria. (Foto: Télam).

Marcela Acuña defendió la corona supergallo CMB luego de vencer por nocaut técnico en el décimo round a Rossilette Dos Santos, pugilista brasileña. La pelea se desarrolló en el Polideportivo Cincuentenario de Formosa.

La pelea se desarrolló en el Polideportivo Cincuentenario de Formosa y significó la cuarta defensa del título CMB -también es campeona AMB- de la Tigresa Acuña.

La definición, tardía por parte del árbitro uruguayo Aníbal Andrade, llegó a 33 segundos del final cuando la superioridad de la campeona era abrumadora y la brasileña tenía claras huellas del castigo recibido.

La Tigresa, que se inició en el profesionalismo a los 21 años y lleva 12 como rentada, elevó su palmarés a 35 peleas ganadas (17 antes del límite) y cinco reveses.

Dos Santos, de 35 años y nacida en Curitiba, quedó con un record de 21 combates ganados (13 por la vía rápida) y cinco derrotas.

TELAM